sábado, 10 de mayo de 2008

TOTAL...

Los pájaros huyeron, las nubes se escondieron,
no oí lo que dijeron, total...
Pensando que nunca más me amarías,
un vacío de hielo, había en mi interior.

Esa tarde hostil encendí la mecha.
El cielo enojado gritó.
Sentí explotar un polvorín.

Angustiado el mar,
recibió al negro manto desbordado
y me obligó a ver,
bajo la lluvia cayendo sin fin,
que los restos de mí,
eran restos de tu amor impregnados.
.

No hay comentarios: